Como la cosa no para, ya estoy de cabeza desarrollando nuevos proyectos y contenidos de no ficción. Armando alianzas, escribiendo y planificando, para que las ideas se materialicen en producciones audiovisuales de alto valor futuro.
Es lo maravilloso de pensar en el cine de 100 años más, como eternizó el gran Patricio Guzmán. No sólo aterrizar las locuras para que puedan llegar a ser algo terrenal, también dejar volar los sueños hacia el infinito y más allá.
En este contexto comparto mi participación en el proyecto de Luis Yáñez Morales sobre René Ríos Boettiger, el creador de Condorito. Ahí Limbo es productora asociada y me toca ejercer como productor ejecutivo y también como asistente de dirección en algunas escenas.
Esa serie documental cuenta con financiamiento CNTV. Espero seguir la misma suerte con «Corresponsal» (proyecto de autor). También en el proceso de guión de «El creador de la Jugada Imposible», proyecto documental basado en la historia de Ramón Unzaga, el inmigrante español creador de la «La Chilena».
Esta última historia llegó a mí por rebote de la infancia. Gracias a mi coterráneo y compadre, el inigualable Patricio Ulloa y su relación familiar con los Unzaga descendientes de este crack, cuyo nombre y hazaña merecen ser lanzadas al cielo con valentía y destreza, con osadía y habilidad; ya sea para defender la denominación de origen, como para anotar el gol más lindo que un chorero pueda hacer, en honor a Talcahuano y su memoria.